- Los perros podrían llevar abandonados semanas
- La protectora Scooby se personará como acusación particular
Valladolid.
Han forjado su leyenda como los grandes rescatadores de personas perdidas en la montaña. La paradoja, uno de los días más negros para esta raza, ha tenido que ocurrir en Villanueva de Duero con la muerte por sed e inanición de cuatro ejemplares de san bernardo, perros que miden no menos de 65 centímetros en la cruz y que pesan en torno a 80 kilos, lo que da idea del grado de abandono al que fueron sometidos.
El caso se ha destapado por la intervención de la Guardia Civil tras el aviso de unos vecinos, extrañados de no escuchar los constantes ladridos de los perros. Y lo que es más asombroso, es que cuando llegaron los agentes, el grado de putrefacción de los molosos era tal, que costaba saber a qué raza pertenecían, a pesar de que el tamaño y el pelaje de estos perros alpinos es muy característico.
"Ha tenido que ser una muerte espantosa. Nos parece normal que hayan imputado al dueño un delito de abandono, pero no nos cuadra que no le hayan añadido un presunto delito de maltrato", señaló este martes Fermín Pérez, responsable de la Sociedad Protectora de Animales y Medio Ambiente, Scooby, de Medina del Campo.
Pérez señaló que este tipo de perros puede soportar hasta 40 días sin comer, aunque "otra cosa" es el tiempo que han aguantado sin beber. A su juicio, abandonos de este calibre deben ser castigados con todo el peso de la ley, por lo que anunció que su protectora se presentará como acusación particular.
En la misma línea, un veterinario de Valladolid aseguró que la muerte debió producirse por no beber. "Depende de las condiciones y de la temperatura. Lo normal es que mueran al cabo de 3 o 5 días. Cuando la deshidratación llega al 10% o al 15%, se mueren", indicó el veterinario, quien destacó que "por fortuna" no son habituales estos casos en la provincia.
Tras las investigaciones abiertas por el aviso de los vecinos, el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona), de la Guardia Civil de Valladolid, procedió a la imputación de una persona, un varón de 32 años con domicilio en Valladolid y con finca y casa en Villanueva, como autor de un delito relativo al Medio Ambiente. En concreto, por abandono de animales domésticos con resultado de muerte.
Una vez se hizo cargo el Equipo de Protección a la Naturaleza de la Guardia Civil de Valladolid, y realizó una inspección ocular en el lugar, descubrió en el interior de la finca los cadáveres de cuatro perros de raza san Bernardo, por lo que una vez localizado el propietario de la finca se procedió a imputarle el hecho delictivo.
El Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil de Valladolid instruye las correspondientes diligencias que han sido remitidas al juzgado.
Fuente: http://www.elmundo.es/elmundo/2010/06/29/castillayleon/1277834675.html
Monstruoso!
ResponderEliminarNo merecer ser considerado humano.
La crueldad llevada a límites extremos.
Espero que la justicia aplique la ley : "Abandono seguido de muerte" y lo castigue como corresponde.
No entiende a qué niveles de perversidad llega el género humano con seres inocentes .
Abrumadora noticia.
Me espanta!
Tienes toda la razón. Es inhumano !! Y no se puede entender que personas hagan este tipo de cosas !! Las leyes deberían ser más duras con ellos !! Espero que pague por lo que ha hecho y no quede impune como tantas veces pasa.
ResponderEliminarUn abrazo, Carmela.